Hoy, en 'Sin Hora de LIGA' estrenamos nueva sección. Se trata de 'Mitos y Leyendas', un lugar en el que recordar aquellos jugadores de épocas pasadas que nos maravillaron de alguna u otra manera. Por su grandeza, su calidad, éxistos... o por su controversia, polémica... En definitiva, un espacio para el recuerdo sobre todo de los '80 y '90.
Borja Fernández.
No hay duda de que Brasil ha sido, y es, un país increíblemente prolífico para el fútbol. Además, podríamos decir que las principales estrellas brasileñas de los últimos tiempos han pasado por nuestra liga, con mejor o peor resultado, aunque normalmente han brillado (Kaka' es la excepción que cumple la regla). Algunos equipos, de primer nivel, aglutinan una cantidad considerable de jugadores brasileños en sus plantillas, foco de creatividad, magia, pero también, en muchas ocasiones, indisciplina.
Es el caso del Milan, que vino al Bernabéu con algunas de esas estrellas, como Ronaldinho. Viendo jugar al brasileño me acordé de Romario. Es bien cierto que Ronie no está en su mejor momento pero sigue teniendo pinceladas de la clase que muchos jugadores brasileños nos han brindado desde siempre, aunque su imagen en el campo fuera pésima en cuanto a despliegue físico.
Fue esa dejadez y ese juego al “tran-trán” el que hizo acordarme de Romario. Porque eso sí, a excepción de Ronaldo (otro brasileño más) no he visto jugador con tan poco compromiso físico a la par que tantísima calidad, a raudales.
En aquel Barça de la temporada 93/94, el tándem con Laudrup era imparable. Aquel año nos ha dejado para la historia jugadas antológicas, como la famosa “cola de vaca” a Alkorta.
Junto con Bebeto, llevó a aquella selección de Brasil de los Dunga, Branco, Mauro Silva... a ganar el Mundial USA 94. Era una selección sin mucho juego pero con una extraordinaria pegada y creatividad arriba que les valió para ganar el Mundial.
En el Valencia, tan sólo jugó 9 partidos oficiales pero también dejó muestras de su calidad, y de su carácter.
En la actualidad, y tras pasar por varios equipos (haciendo goles) , sigue en activo con 44 años, en el America de Río de Janeiro.
Algunos de los datos que pueden ilustrar la grandeza de Romario está su anuncio de los 1.000 goles (incluyendo categorías inferiores), aunque oficialmente no está reconocido, y como gran goleador, tiene en su haber el hecho de ser el jugador que más veces ha sido Máximo Goleador en Primera División en la historia, con un total de 14 veces, en las ligas brasileña, holandesa y española.
Casi nada…
Un jugador de dibujos animados